Pasé por un edificio de oficinas cuyo negocio principal durante 2006-2007 era el de hipotecas y préstamos para el financiamiento de propiedades. Hoy pasé por el mismo lugar y me maravillé del cambio o más bien de la adaptación empresarial realizada para asegurar la sobrevivencia del negocio.
Lo interesante es que aquellas empresas que se han adaptado aún funcionan, mientras que las que no, han perecido. Aunque adaptarse a una situación difícil requiere mucho más que cambiar un letrero, podemos aprender algunas cosas de estos negocios:
1. Hay que estar dispuestos a cambiar.
2. En tiempo de “vacas gordas” hay que guardar para cuando bajen de peso.
3. Hay que estar dispuesto a seguir aprendiendo y seguir capacitándose para comenzar algo nuevo cuando sea necesario.
4. Hay que tomar riesgos si queremos alcanzar nuestras metas
2. En tiempo de “vacas gordas” hay que guardar para cuando bajen de peso.
3. Hay que estar dispuesto a seguir aprendiendo y seguir capacitándose para comenzar algo nuevo cuando sea necesario.
4. Hay que tomar riesgos si queremos alcanzar nuestras metas
5. Hay que perseverar
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